Ay amor!…
Ay amor!…

Ay amor!…

Ay amor, amor… empecinado amor. Que nos envuelves en lazos de azul y ternura, y atrapas el alma con tu dulzura. Amor obstinado que vence los obstáculos,  desnuda nuestros miedos y se ríe de nuestras inconsistencias. Amor que no entiendo, que dueles, que  nos tocas con tu magia  para irte tantas veces a buscar nuevos horizontes. Amor que  siempre  dejas tu huella en el alma, huella de seda y nácar brillando sobre la arena. Amor que no sexpones, nos invalidas  y dejas de nube nuestros proyectos para llevarnos por tus propios caminos.

Porque el amor, encuentra su propio camino. Y si no lo encuentra, lo hace. Por sendas nuevas o por calzadas rotas y desgastadas, por veredas anchas o por el filo de una cornisa;  hallará camino.

Nunca entenderemos su esencia, que nació en la eternidad acunada en el alma del Eterno. Sólo lo vemos a veces;  venir  de papel, venir de miradas alegres, venir de mariposas en el estómago. Ysentimos por un momento su toque  increible, y  luego queda decidir  que haremos con nuestros miedos y las barreras que le fuimos poniendo cuando se iba,  porque hoy que lo necesitamos de nuevo tenemos que vencerlas.

En el mes del amor te ofrecemos un enfoque distinto: mirarnos adentro y examinar los temores que nos impiden acercarnos al amor real.  Que nos impiden romper nuestras rutinas y jugarnos por lo que amamos.

La gente piensa que amar es tener lo que quiere o necesita. Pero el amor no es una necesidad, ni una satisfacción de deseos personales. El amor tiene entidad propia,  y a veces nos visita, y entonces es nuestra elección albergarlo o no.  Cuenta una historia que Ivonne era una  indigente más en una gran ciudad; aún joven, sucia y hosca, la única compañia  que aceptaba eran sus perros. Ivonne había amado  a un hombre, y a sus hijos; pero el dolor la había marcado y sus puertas estaban cerradas.  Una mujer policía que hacia la ronda por el lugar empezó a acercarse a ella – tal vez por su propio pasado dificil- pero Ivonne le dedicaba a su atención siempre palabras duras, de todo desconfiaba. Más el amor es persistente e incomprensible, la mujer policía comienza a visitar a Ivonne con frecuencia, le  lleva alimento a sus perros y con paciencia la ayuda, como en el cuento de «los dos caballos».  Finalmente Ivonne se rinde al cariño sin condiciones y el amor que traza su propio camino le cambia la vida. Pero… ahí está el maravillloso secreto del fin del amor, cuando uno dá, entrega y se abre, finalmente recibirá. La mujer policía se vé enfrentada en esta interacción relacional con sus propios miedos, y puede ella también verse y abrirse a volver a amar.

Tal vez cerrarse es la opción para no sufrir, pero también es el pasaporte a la soledad. El ser humano no nació para estar solo. Para amar hay que confiar, hay que abrirse ( sí, otra vez) y atreverse a volver a sufrir, a volver a tener el corazón en bandolera como cantaba Adamo. Te aseguro que vale la pena, porque un día todo terminará pero el amor nunca dejará de ser.

Te dejo  un video. Feliz día del amor y la amistad!

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Imagen: a! Diseño

Texto: Edith Gero

Video: Disney.

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